Spanish Women of Wonder

Hoy me enorgullece presentar un proyecto en el que llevo trabajando bastante tiempo, una aventura que en realidad comenzó hace algo más de un año, y que ha permitido dar a conocer el trabajo de 10 autoras de ciencia ficción en español. Me refiero a Spanish Women of Wonder, el proyecto de crowfunding para traducir al inglés los relatos comprendidos en la antología Alucinadas, de la editorial Palabaristas.

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Meses después de la publicación de esta obra en español, hemos organizado una iniciativa de micro-mecemazgo en la plataforma Kickstarter para lograr traducir los relatos al inglés.

Necesitamos la máxima difusión, de manera que Spanish Women of Wonder sea conocida por el mayor número posible de personas. Queremos que las voces de las autoras de ciencia ficción en español, procedentes de ambos lados del Atlántico, se oigan en todo el mundo y eso será posible si conseguimos publicar las historias en el mercado de habla inglesa, el mayoritario en estos momentos.

Os recordamos que la antología cuenta con la participación de la extraordinaria Angélica Gorodischer, que amablemente participa con la historia «A la luz de la casta luna electrónica». Asimismo, la obra cuenta con un prólogo de excepción de la mano de la editora norteamericana Ann VanderMeer, y con las historias de Nieves Delgado (España), Yolanda Espiñeira (España), Felicidad Martínez (España), Layla Martínez (España), Laura Ponce (Argentina), Teresa P. Mira de Echeverría (Argentina), Sofía Rhei (España), Lola Robles (España), Carme Torras (España), y Marian Womack (España).

Hemos contactado con una traductora especializada en traducciones de ciencia ficción y fantasía para llevar a cabo este proyecto que, si todo sale como esperamos, verá la luz en Noviembre de 2016.

¡Os pedimos que nos ayudéis a dar difusión a este kickstarter, para hacer realidad este sueño!

¡Gracias!
https://www.kickstarter.com/projects/1815756115/spanish-women-of-wonder

 

Alucinemos

alucinadas-finalHoy sale a la venta la antología de relatos de ciencia ficción en español escritos por mujeres Alucinadas, de la editorial Palabaristas, disponible como ebook mediante la plataforma de venta online Lektu. Durante las próximas 48 horas el libro podrá adquirirse a través de pago social y, del 30 de noviembre al 6 de diciembre (fecha de inauguración de la MIRCon) podrá comprarse por 1€. A partir del 6 de diciembre, el precio quedará fijado en 1,99€.

El próximo 7 de diciembre, a las 13:00, tendrá lugar la presentación oficial de la antología en el seno de la MIRCon. El evento contará con la presencia de Cristina Macía, de parte de Palabaristas, y de Leti Lara Palomino, como representante del equipo editor. Además, varias autoras participarán en la presentación: Nieves Delgado, Yolanda Espiñeira, Sofía Rhei, Lola Robles y Carme Torras.

Laura Ponce

Laura Ponce

La mejor manera de presentar la antología es dejar que cada una de las escritoras explique qué le llevó a componer cada historia. En este sentido, Laura Ponce nos dijo: «La idea para escribir “La tormenta” se me ocurrió después de ver un documental sobre un río de África que se seca por completo durante buena parte del año, pero cierto día se presenta una tormenta, una gran tormenta, y el cauce seco comienza a inundarse y los peces que se habían mantenido enterrados van saliendo, boqueando, abriéndose paso en el barro. Me pregunté qué pasaría si no fueran sólo peces, y para contarlo quise armar un relato que fuera el relato de un relato de un relato.»

Teresa P. Mira de Echeverría

Teresa P. Mira de Echeverría

Teresa P. Mira de Echevarría explica así el germen de su historia: «En esencia las 9 versiones de la protagonista, cada una relacionada con un animal, son en realidad, los 9 animales con los que yo me siento relacionada o «identificada». Me di cuenta que era como partirme en distintas versiones de mí pero que era necesario reintegrarlas.  Pensando en eso —y con el querido gatito de Schrödinger siempre dándome vueltas por la cabeza—, se me ocurrió que la mente humana, la persona en sí, podrían ser una caja donde lo múltiple se vuelve uno y viceversa, como un microcosmos cuántico. Además está esa cosa zenoniana de moverse en la inmovilidad, el pasaje heraclíteo entre opuestos que siempre me gustó.”

Layla Martínez

Layla Martínez

En palabras de Layla Martínez: “Me obsesionaba la idea de la historia de Croatoan desde que la descubrí, porque siempre me ha llamado la atención el hecho de abandonar la civilización y las historias que giran en torno a eso, desde los ascetas y santos medievales a las actuales. De alguna manera en el relato los que deciden vivir (o se ven obligados a ello) en la colonia subterránea también han abandonado la civilización porque ésta ya no tiene nada más que ofrecer. De alguna manea también se han hecho salvajes e incivilizados”

Marian Womack

Marian Womack

Marian Womack se basó en una experiencia muy personal para escribir su cuento: «Este verano descansamos unos días en Black Isle, y nos alojamos en Pier Cottage. Visitamos las ruinas del castillo, recorrimos el embarcadero, paseamos por la llanura de marea, espiamos a las aves desde los ventanales de la casa. Es un entorno hermosísimo, pero incierto, frágil. En los últimos años, cada vez que hemos vuelto a calzarnos las botas de montaña para salir al campo, un entorno que añoramos desde la gran ciudad, ha sido para volver a escuchar las mismas palabras, casi siempre referidas a la pérdida: del número de aves, del frágil ecosistema, de especies conocidas. Esto está ocurriendo muy rápido, y sólo ahora empezamos a ser conscientes de ello. Creo que se trata de un tema del que necesitamos con urgencia iniciar una conversación, también desde la literatura.»

Yolanda Espiñeira

Yolanda Espiñeira

A la hora de concebir su relato, Yolanda Espiñeira explica: «’El método Schiwoll’ trata de la traición. La traición personal y profesional, que es algo presente en la vida de todo el mundo tarde o temprano, así como los modos en que los humanos transigimos con ella para poder seguir viviendo.  Personalmente, me interesaba tratar este tema, pero el hacerlo en forma de literatura especulativa, me permitió tratar también, aunque tangencialmente, otros temas como el problema de las relaciones entre la mente y el cuerpo, y el estatus de la humanidad como especie.”

Carme Torras

Carme Torras

“Memoria de equipo” de Carme Torras surge de la relación entre la autora y el deporte: “Empecé a jugar a básquet a los ocho años y sigo jugando. La compenetración que llega a alcanzarse dentro de un equipo siempre me ha parecido algo mágico. No es que el equipo sea más que la suma de sus miembros, es que es otra entidad, con memoria y consciencia propias. Un referente de mi relato es la consciencia colectiva descrita en «Más que humano» de Theodore Sturgeon que, trasladada al terreno de básquet y aderezada con las increíbles prestaciones que ofrecerá la tecnología en un futuro próximo, abre un sinfín de posibilidades.”

Nieves Delgado

Nieves Delgado

Sobre su cuento “Casas Rojas”, Nieves Delgado aclara: “Pensé en cuáles serían los límites de «humanidad» que se le impondrían a una máquina, es decir, en qué momento el ser humano se plantearía si una inteligencia artificial es algo más que una máquina. Busqué una situación límite, y se me ocurrió la esclavitud sexual. Porque busco una definición de la cualidad de «humanidad» que sea externa a la propia biología. En realidad, creo que indago en eso que místicamente se conoce como «alma».”

Felicidad Martínez

Felicidad Martínez

Para Felicidad Martínez: «Tres cosas me sirvieron de inspiración para escribir “La plaga”. La chispa fue un artículo científico que me dejó flipando. Desde entonces leo todo lo que cae en mis manos sobre plantas y debo decir que son unos seres vivos muy infravalorados. En segundo lugar, la película Starship Troopers; cada vez que la veo disfruto de esa mala baba, ese humor negro que destila en cada detalle en apariencia trivial. Para mí, el humor no es solo un alivio, sino una sátira. Nada, absolutamente nada en mi relato está puesto porque sí. Todo tiene una intención a la espera de una reacción. Unas veces de forma sutil, otra de manera más evidente. Por último, el relato “Maleficio” de Juan Miguel Aguilera. Un Doom, como el propio título indica, que te tiene enganchado de principio a fin, y no solo por la acción, sino porque además está cargado de pequeños detalles que le dan profundidad y originalidad.»

Lola Robles

Lola Robles

Cuando le preguntamos a Lola Robles, nos contestó: «Al empezar a escribir «Mares que cambian» imaginé un planeta, Jalawdri, donde había cinco sexos y géneros considerados «naturales» en lugar de dos, y donde irían personas de otros mundos para transformar su cuerpo y convertirse en quien siempre habían deseado ser. He intentado adecuar el lenguaje a las personas de ese mundo y a los visitantes. Finalmente creo que he escrito también un relato sobre la necesidad de pertenencia a un lugar, a un grupo, a unos afectos.»

Sofía Rhei

Sofía Rhei

La autora de “Techt” es Sofía Rhei, a la que: “La idea se me ocurrió al ver cómo en los libros estilo «best-seller» el vocabulario es cada vez más reducido y, al mismo tiempo, tras mi experiencia como profesora en la que muchos adolescentes sustituían palabras enteras por signos, contaminados por los SMS. Vi a un chico japonés pulsando teclas de su móvil sin mirarlo, mientras mantenía otra conversación hablando y pensé que las posibilidades de marcación estaban en pañales. Al introducir en los teclados una variable tan frecuente en videojuegos como la marcación simultánea, se multiplican literalmente las posibilidades.”

Alucinadas: Lista de seleccionadas y ganadora de la convocatoria

Empezamos a alucinar el pasado abril, cuando nos interrogábamos sobre la escasez de obras de ciencia ficción escritas por mujeres. En general, hay menos escritoras que escritores, a excepción de géneros como el juvenil, el infantil o el romance. Esta tendencia resulta cuando menos llamativa en un tipo de literatura que, como la ciencia ficción, es un género que ofrece una libertad de posibilidades en cuanto a temáticas, tratamientos y estructuras narrativas. Al parecer, según estudios realizados en el mercado anglosajón (como los de la editorial Tor o la iniciativa VIDA Women in Literary Arts) , las mujeres envían menos manuscritos a las editoriales y a las revistas y fanzines de género, resultando en menos publicaciones y menos reseñas por parte de la crítica especializada.

5cb85-cyborgfemaleEn el mercado de habla hispana, la realidad es aún más acusada. Si ya de por sí lo fantástico es un género circunscrito a una minoría, la ciencia ficción es aún más restringida a nivel de fans. Y la sequía de escritoras que cultiven estos campos, nunca mejor dicho, es patente. Ante esa realidad, había dos opciones: lamentarse hasta el fin de los tiempos o reaccionar. El sello Palabaristas, de la mano de Cristina Macía, optó por lo segundo y me lanzó un difícil desafío: organizar, convocar y seleccionar una antología de diez relatos de ciencia ficción en español escritos por mujeres.

Como los retos en solitario son mucho menos interesantes y productivos, embauqué con malas artes a mi amiga y compañera de las redes, María Leticia Lara Palomino, del blog Fantástica Ficción, para que me acompañara en esta travesía. Su ayuda y dedicación han resultado imprescindibles a la hora de coordinar el trabajo de recepción, lectura y valoración de textos, y estoy segura de que sin ella, el proyecto se hubiera alargado y dificultado mucho.

Después de bautizar el proyecto con un nombre que representara las inquietudes de nuestra reacción, la convocatoria de Alucinadas nació un 24 de abril a través de un llamamiento a todas las escritoras en lengua española para que nos enviaran sus relatos originales. Gracias a las redes sociales y a la maraña de amistades con blogs amigos de este y el otro lado del Atlántico, obtuvimos la atención y el eco suficientes para que en los 5 meses de admisión de manuscritos recibiéramos:

  • 205 cuentos de 185 autoras (algunas escritoras enviaron varios manuscritos).
  • 12 países representados: España, Argentina, México, Cuba, Perú, Chile, Colombia, Puerto Rico, República Dominicana, Venezuela, Guatemala y Rumanía.
  • Temáticas muy variadas que, por orden de volumen de relatos presentados, se enmarcan en: Distopías, fantasía (que no se admitieron a concurso), biopunk, terror, viajes en el tiempo, romance, ciberpunk, space opera, post-apocalíptico, steampunk, ciencia ficción militarista, ciencia ficción social, exploración, primer contacto, ciencia ficción dura, cómic, ficción especulativa, humor, new weird, historia alternativa, viajes estelares y thriller.

Antes de ofrecer la lista de seleccionadas, queremos agradecer el esfuerzo realizado por todas y cada una de las mujeres que nos han enviado sus relatos. Sin ellas, sin vosotras, esta antología no tendría sentido. He aquí las seleccionadas, que son todas las que están, aunque no estén todas las que son, por motivos de espacio:

  1. Nieves Delgado (España) – Casas Rojas
  2. Yolanda Espiñeira (España) – El método Schiwoll
  3. Felicidad Martínez (España) – La plaga
  4. Layla Martínez (España) – Bienvenidos a Croatoan
  5. Laura Ponce (Argentina)- La Tormenta
  6. Teresa P. Mira de Echeverría (Argentina)- La Terpsícore
  7. Sofía Rhei (España) – Techt
  8. Lola Robles (España) – Mares que cambian
  9. Carme Torras (España) – Memoria de equipo
  10. Marian Womack (España) – Black Isle
  11. Angélica Gorodischer (Argentina)- A la luz de la casta luna electrónica

Como podéis comprobar, hay una viajera más en esta nave: no es otra que la escritora argentina Angélica Gorodischer que, sensibilizada con los objetivos de nuestra antología, accedió muy amablemente a cedernos uno de sus relatos, –fuera de concurso-, recogido en su libro homónimo publicado por Ediciones Andrómeda en 1977. Desde aquí queremos agradecer a Angélica su generosidad y buena disposición para con nuestro proyecto, y nos sentimos muy honradas de poder contar con ella entre las páginas de Alucinadas.

Después de leer cuidadosamente las historias seleccionadas, el equipo editor decidió que la ganadora de la convocatoria fuera la escritora argentina Teresa P. Mira de Echeverría por su cuento “La Terpsícore”, una historia de ciencia ficción dura y quántica, en la que se abordan los dilemas éticos derivados del progreso científico. Estamos convencidas que esta historia representa el sentido de la maravilla y la búsqueda de nuevos ángulos con los que abordar temas que preocupan al ser humano, que para nosotras forma parte de lo que hace intrínsecamente interesante y entretenida la ciencia ficción. ¡Felicitamos a Teresa   desde aquí!

Por último, solo nos queda revelar el nombre de la mujer que ha aceptado escribir el prólogo. Se trata de la norteamericana Ann Vandermeer, una mujer cuya extensa experiencia en el mundo de la edición -tanto en su etapa como editora de la revista Weird Tales como en su labor de coordinación de antologías junto a su marido Jeff Vandermeer- le han valido el reconocimiento internacional a través de numerosos premios. Su conocimiento del español le ha permitido involucrarse en el proyecto y queremos también agradecer su participación desinteresada y su capacidad de trabajo, a pesar de los numerosos compromisos profesionales a los que tiene que hacer frente.

La antología se presentará en el marco de la próxima Hispacón –la MIRCon-, que se celebrará en Montcada y Reixac del 6 al 8 de diciembre de 2014. Al evento acudirán María Leticia Lara Palomino, en representación del equipo de editoras, y Cristina Macía, del sello Palabaristas, así como varias de las autoras seleccionadas.

Creemos haber demostrado que hay un verdadero interés por parte de las autoras en desarrollar historias de ciencia ficción, y que solo necesitan incentivos y oportunidades que las motiven para que pongan su imaginación a trabajar. Pensamos que el género en su conjunto debe estar de enhorabuena ante el volumen de cuentos recibidos y el alcance internacional que ha adquirido el proyecto. Esto no es el final del camino para Alucinadas, sino solo el principio de un recorrido que esperamos sea duradero y fructífero. Estad atentos porque, en unos días, desvelaremos la portada de la antología.

Walter y la antología «Ellos son el futuro: Un año de Ficción Científica»

A veces, siento ternura por el blog, aunque sea un sentimiento que se me pase pronto. Es un ser tan centrado en sí mismo y en sus necesidades pero, cuando me hace un favor, no puedo dejar de sentir hacia él orgullo maternal… un fenómeno efímero, afortunadamente. El otro día me presentó a Walter, uno de sus amigos virtuales. Porque yo escribo, queridos ojeadores de letras que leéis estas líneas. Invento historias que algunas almas caritativas leen, más por simpatía que por auténtico interés. Pero el blog cree que ha llegado el momento de lanzar mi carrera profesional y ha puesto a Walter en mi camino.

Walter resulta más antipático que el blog, todo un logro. Es un ser enjuto, encorvado y perpetuamente ceñudo que se pasa el tiempo hablando por el móvil. No entiendo cómo puede pertenecer al círculo de amistades del blog, pero hace mucho tiempo que dejé de preguntarme por sus relaciones sociales… siempre me sorprende con alguna criatura exótica. Walter no deja de ser otro personaje extravagante de los que colecciona el blog. No me hace mucha gracia que se haya convertido en mi agente –me lanzó su tarjeta de visita de muy malos modos mientras discutía acaloradamente por teléfono-. Al menos, ahora me representa un agente. Espero milagros que no llegarán, jugosos contratos que nunca se materializarán, y fama y reconocimiento que jamás me visitarán.

portada

Sospecho que Walter no ha leído ni una línea de mis relatos, ni un capítulo de mi novela. No conoce a “Rem”, ese extraño ser del que hablo en el cuento homónimo recogido en la antología Ellos son el futuro, que la web Ficción Científica ha reunido. Al mando de esta iniciativa está José Antonio Cordobés, ese incansable amante de la ciencia ficción que con mucha ilusión y en su tiempo libre ha creado una red para que los aficionados compartamos nuestra opinión sobre los títulos del género y descarguemos relatos de autores de ambos lados del Atlántico. Hace ya un año que http://www.ficcioncientifica.com se puso en marcha y no cesa de añadir funcionalidades para ayudar a realizar búsquedas de libros y divulgar el género en general. Es un punto de encuentro, un lugar donde cualquier enamorado de la ciencia ficción puede asomarse a las novedades, los clásicos, las antologías y compartir con otros sus ideas sobre cada obra.

Precisamente para celebrar el primer aniversario de su puesta en marcha, José Antonio tuvo la idea de agrupar en un e-book gratuito (disponible en http://www.ficcioncientifica.com/pages/ebook ) los relatos que varios autores habíamos publicado en su web, dada la buena acogida que estaban teniendo entre los internautas. El resultado es precisamente Ellos son el futuro: Un año de Ficción Científica, la antología ya mencionada y que toma prestado su título de un conjunto de micro-relatos de Santiago Eximeno.  Según Eximeno el texto “es un experimento, una ficción mínima fragmentada cyberpunk inspirada por las obras de Jorge Baradit y Francisco Javier Pérez. En el e-book también aparece otro relato suyo “Madre solo hay una”, de la que su autor dice: “Lo escribí porque había tocado antes el tema de la clonación pero no había quedado del todo satisfecho con el resultado. Quería buscar cierta sensibilidad que aparece muchas veces en mis micro-relatos de horror o costumbristas pero que no había utilizado hasta ahora en los de ciencia-ficción. La inspiración, Ken Liu.”

Precisamente el chileno Jorge Baradit es otro de los autores que aparecen en este libro digital de la mano del relato “La conquista mágica de América”. En palabras del autor, este texto “en su momento quiso poner de manifiesto los distintos niveles de realidad que se viven en este territorio. Acá los indígenas están vivos, las culturas originarias y sus cultos, los ritos alucinógenos, la magia urbana florece, el sincretismo cristiano-chamánico-whatever está mezclado con el asfalto. Los rezos católicos y las ceremonias mapuche se transmiten por fibra óptica. La historia de ‘La Conquista de América’ tiene una dimensión mito-poética en mi interior que quería hacer nacer de algún modo. Este texto es un intento por darle forma a una nueva manera de contar la fantasía desde América.”

Hay dos relatos de Juan González Mesa en esta colección. El primero, “El historial del egófago”, es una inquietante historia de terror de la que Juan dice: «Creo sinceramente que he creado un personaje que no es reflejo de un personaje anterior». De su segundo relato “Putas de Tijuana” apunta: “La ciencia ficción a menudo intenta hablar de las grandes preguntas sobre el hombre, pero este es solo un relato acerca de la amistad y de tener las pelotas en su sitio».

Otro de los autores participantes es Miguel Santander que define su cuento “La gran noticia” como “un pequeño experimento que juega con la percepción de un mismo hecho, una rueda de prensa que anuncia algo muy esperado a través de diferentes puntos de vista con distinto grado de información e implicación emocional sobre los hechos en sí. Hay que aclarar, por supuesto, que cualquier parecido entre «La gran noticia» y la realidad, en estos momentos en que todos miramos con lupa las declaraciones de nuestros dirigentes y las cortinas de humo están a la orden del día, es mera coincidencia… o no.”

Nieves Delgado contribuye con dos relatos, “Hacia dentro” y “Dariya”, en la antología. En el primero se hace un guiño especial a Ficción Científica y el segundo hace pensar inevitablemente en Asimov. La autora comenta de ellos que “son especiales porque buscan explorar la naturaleza última del ser humano, la esencia de lo que somos, y mostrar cómo esos límites rozan una y otra vez con el mundo cambiante que nos contiene. No sé si soy escritora, pero desde luego, lo que sí soy es buscadora”.

El relato de Josué Ramos “Presunto, presunto asesino” se debate entre el humor y el terror psicológico, tal y como él mismo señala: “yo quería escribir una pequeña reflexión sobre la “presunción de inocencia”, tan relativa a veces ante la opinión pública; y sobre el excesivo (y, muchas veces, erróneo) empleo que se hace últimamente de la expresión «presunto». He de confesar que el germen para poner en marcha la idea está en unas cuantas viñetas de «Las calles de arena», de Paco Roca (tras leer el relato, no es difícil saber a cuáles me refiero). A partir de ahí me dejé llevar, por absurdo que me pareciera el texto, hasta el resultado final: un relato weird sobre una situación terriblemente absurda en la que la apariencia puede llegar a condenar a una persona, algo que en nuestra sociedad actual no es tan poco común. Es muy diferente a cualquier cosa que haya escrito antes. Aunque no lo parezca, un relato muy realista. Y, tras terminarlo, me dio la sensación de que es un relato que se hizo a sí mismo.”

José Ramón Vázquez es otro de los autores incluidos en la antología. Para él su relato “es una coctelera entre justicieros urbanos como el Castigador o Harry el Sucio, el actual clima de indignación más que justificada contra los auténticos causantes de la crisis (poder financiero apoyado por el poder político) y la omnipresencia de las redes sociales y programas de tele-realidad. Mezclado, agitado y pasado por la batidora aparece “Share Rider”. […] Yo echaba en falta una crítica social irónica y descarnada como las de Womack en «Ambiente» y otros cyberpunk de los 80. En una situación muy parecida a la actual esa gente estaba criticando las políticas de Reagan y Thatcher usando el género. Nosotros, en lugar de ese tipo de historias teníamos zombis, post-apocalipsis y fantasía medieval. Había casi más crítica social en la literatura juvenil que en la de género orientada a adultos. Necesitaba leer algo como “Share Rider”, pero parecía que nadie estaba escribiéndolo. Por eso me puse manos a la obra.”

“El cadáver sin nombre” de Felicidad Martínez es una historia en la que se mezcla la fantasía, la ciencia ficción y el weird. El personaje principal resulta tan cercano y tan forastero al mismo tiempo que es imposible que deje indiferente al lector. De este texto, su autora señala: “creo que yo no soy quien debe decir qué hace especial mi cuento. Eso debe juzgarlo el lector. Sí puedo decir, sin embargo, que para mí la premisa parte de «nada es lo que parece», y que espero haber conseguido el efecto que andaba buscando.”

Manuel Moledo aporta el relato “Último viaje” y, al preguntarle qué destacaría de él, respondió: Si me parece que tiene un punto nuevo en la forma de aunar dos conceptos que había sido ya conceptualizados por algún otro autor:  el uso del entrelazamiento cuántico (que hace posible el «ansible» de Ursula K. Le Guin y al que yo simplemente llamo «comunicación cuántica») y la digitalización de la personalidad (que es usada con todo su jugo en Carbono Alterado de Morgan). Bueno, y la clonación, pero eso está tan usado que ni vale la pena comentarlo. Dos cosas más que me gustan, aunque no creo que hagan el cuento especial. El alegato contra la ejecución como castigo, y la importancia de la edad biológica (nivel de testosterona) en el comportamiento. “

“Adaptación” y “Futuro” son los dos cuentos de Ricardo Manzanaro Arana en esta antología. Los describe como “de corte humorístico, que es un estilo dentro de la ciencia ficción poco frecuente, y en la ciencia ficciónen castellano creo que aún más. Mis autores preferidos de cuentos son Fredric Brown y Robert Sheckley, con lo que te puedes hacer una idea del estilo que sigo. También en muchos de mis cuentos trato el tema sociológico.”

“Rem”, de Cristina Jurado, es más una leyenda weird que un relato. En palabras de su autora “se trata de antropomorfizar el sentimiento de culpa, tan destructivo. Me hubiera gustado escribir algo de ciencia ficción dura, pero cuando José Antonio me pidió un cuento, éste fue el que se me ocurrió. Creo que es más un volcado de emociones propias que una narración en sí, pero es una pieza honesta.” La propia Cristina ha sido la encargada de redactar el prólogo del e-book en el que hace un breve repaso a cada uno de los textos y a sus autores. Y sí, la Cristina Jurado a la que me refiero soy yo misma, pero seguiré refiriéndome a ella en tercera persona para poder despacharme, si creo que se lo merece.

Ellos son el futuro: Un año de Ficción Científica es como una tabla de  tapas de la narrativa breve en español: hay de todos los sabores y con ingredientes distintos para dar gusto a todo tipo de paladares: Ciencia ficción dura, weird, terror, fantasía urbana, ciberpunk, ciencia ficción social… Propuestas frescas de distinta extensión por parte de autores, más conocidos algunos y menos otros, igualmente interesados en apoyar el género que más les gusta en nuestro idioma.

Walter dice que “Rem” (mi cuento) desentona en el conjunto, que debo ser más disciplinada a la hora de escribir y que se acabó eso de regalar relatos. Es increíble cómo puede conversar con dos personas al mismo tiempo (sigue hablando por teléfono) pero si consideramos que lo suyo es más un monólogo que un diálogo, en realidad lo que hace es arrojar palabras por la boca, unas veces dirigiéndose a mí y otras a su interlocutor telefónico.

Me temo que nuestra relación profesional será muy breve. Antes de contratarlo, lo voy a despedir.